El príncipe que intentó matar a Hitler

 9 Noviembre 1989

En una humilde casa en Namibia, un anciano mira por la televisión cómo cae el Muro de Berlín.

Es el Príncipe Friedrich Solms-Baruth IV.

Se gira y le dice a su hijo: “Haz las maletas. Volvemos a casa. A recuperar lo que es nuestro”

{Dentro hilo }Image
Os aviso. Esta es una muy buena historia. Una historia que hace más de 80 años que dura.

Probablemente, la mejor historia con que me haya encontrado jamás.

Pero ya sabéis que las buenas historias, hay que contarlas desde el principio. 
Os aviso, esto de los príncipes es complicado.
Todos se llaman igual.
Por eso, os recomiendo que os fijéis en el numerito romano.

Estos son los protagonistas:
Friedrich III, el abuelo.
Friedrich IV, el padre.
Friedrich V, el hijo y actual príncipe.

Vamos con su historia…Image

CAPÍTULO I: MATAR A HITLER

Retrocedemos al 20 de Julio de 1944.

Estamos en la Wolfsschanze, o la Guarida del Lobo. El cuartel general de Adolf Hitler, donde acostumbra a reunirse con el Estado Mayor de su ejército.

Ese día tiene prevista una reunión a las 12:30h.Image
Una reunión importante. La guerra no va como él esperaba.

Alemania tiene abiertos demasiados frentes… Italia, Normandía, Africa, Rusia…

Algunos dudan de la capacidad de Hitler de evitar la derrota de Alemania.Image
El coronel Klaus von Stauffenberg respira nervioso. El sudor corre por su espalda.

Con el pie comprueba que la cartera esté en su sitio.

Sí, todo bien.

La cartera está en el suelo, apoyada junto a la pata de la mesa. Esa enorme mesa de roble centenario.Image
Esa cartera contiene 1 kilo de explosivo plástico, y un detonador retardado, que explotará en unos minutos.

Los 20 altos oficiales escuchan atentamente el discurso de Hitler. Blablabla…

El tiempo parece haberse parado.Image
Entra un suboficial:

-“Coronel Stauffenberg, una llamada para usted”

Stauffenberg respira aliviado.

- “Por fin”

Se levanta, se disculpa y abandona la sala de reuniones.Image
A las 12:42h explota la bomba.

La habitación queda destruida.

Pero sólo 4 de los 20 asistentes mueren. Adolf Hitler sobrevive.

La enorme mesa de roble ha amortiguado el impacto de la explosión.Image
A pesar del desconcierto inicial, la radio se encarga de hacer llegar la noticia a todos los rincones de Alemania.

Atentado fallido. Hitler vive.

Incluso circula una foto de los pantalones del Führer, destrozados por la explosión.Image
La Operación Valkiria, impulsada por un grupo de militares prusianos que querían parar la guerra, fracasa.

Lo que sigue es una brutal y despiadada campaña de represión.Image
Los impulsores directos del golpe son fusilados a las pocas horas, Stauffenberg incluido.

Hasta 5.000 personas más lo son en las semanas siguientes.

¿Todos son fusilados?

No.
No todos.Image

CAPÍTULO II: LA CASA SOLMS-BARUTH

Esta historia no va del intento de asesinato de Hitler, si no de lo que pasó después.

Especialmente sobre lo que le pasó a uno de los conspiradores:

El príncipe Friedrich Solms-Baruth III.Image
¿Recordáis al anciano que miraba la caída del muro de Berlín?

Pues su padre.

¡Recordad los numeritos, carajo!!! 
¿Quiénes son los Solms-Baruth?

Pues bien, una de las dinastías aristocráticas más importantes de lo que fue el reino de Prusia.

500 años de historia.

Condes desde 1632 a 1888, momento en que pasan a ser príncipes del reino de Prusia.Image
Sus enormes posesiones se extendían por la región de Silesia. Miles de hectáreas de explotaciones forestales, fábricas de vidrio y cerámica, y palacios, muchos palacios.Image
Para que os ubiquéis, la Antigua Silesia y gran parte de Prusia caían en lo que más tarde fue la Alemania del Este.

Quedaos con este detalle, que será importante. 
El príncipe Friedrich III era todo un personaje.

Además de muy rico, era militar, cazador, buen jinete... pero, sobre todo, era un acérrimo pacifista y antinazi.Image
De la 1ª Guerra Mundial se llevó varios recuerdos: Heridas, cicatrices, y la inmutable convicción de que la guerra era una salvajada y una mala idea.

La guerra con los nazis, doblemente mala, sostenía.Image
¿Qué pensaba de Hitler?

En sus propias palabras:

- “Si pudiera, acabaría con ese hijo de puta con un sólo disparo. Pero nunca lo he tenido suficientemente cerca”Image
Se negaba a hacer el saludo nazi. De hecho, dejó la Wehrmacht, el ejército alemán, para no tener que hacer el juramento de obediencia a Hitler.

La Gestapo lo tenía en observación de hacía tiempo. El príncipe se había negado a ceder madera de sus bosques para las fábricas nazis.Image
Pero no se habían atrevido a tocarlo. Hasta ese día.

El 21 de Julio, 6 esbirros de la Gestapo se presentan en su casa para detenerlo.

Pasa los siguientes 9 meses en prisión.
Torturas. Interrogatorios interminables.Image
Pero a diferencia de los demás, no lo fusilan.

¿Por qué?

No os perdáis lo que viene a continuación, que la historia cobra un giro inesperado...

CAPÍTULO III: LOS TRAPICHEOS DE HIMMLER

El estado del príncipe Friedrich III es lamentable.
Da por descontado de que lo fusilarán en cualquier momento.
La Gestapo ya ha descubierto su relación con el círculo de los conspiradores, el círculo Kreisau.Image
También saben que muchos de los conspiradores se reunían en su palacio de Branderburgo, a 15 kilómetros del cuartel general del ejército. Es allí donde discutían los detalles del complot, mientras aparentaban participar en alegres paseos ecuestres.Image
Es en ese mismo palacio donde el Almirante Canaris tenía ubicada su “unidad de sabotajes anti-nazis”. El mismo Canaris que le advertía de hacía años que los nazis traerían la destrucción a Alemania.Image
Friedrich III sabe que ellos lo saben. Que su suerte está echada. Que es cuestión de tiempo que lo fusilen.

Pero no.

No lo fusilan.

Recibe sin embargo una propuesta inesperada.

Atentos. 
Vamos con el malo de la película.

El segundo al mando del régimen nazi.

Os presento a Heinrich Himmler.Image
Un nazi abnegado. Admirador incondicional y fervoroso de Adolf Hitler.

Pero también es un tío pragmático.

Un tío que piensa en el futuro.
Que quiere prepararse por si acaso pasan cosas.
Que quiere labrarse un porvenir… un patrimonio. Vamos, mangonear.Image
Desde 1943 tiene en marcha un plan secreto para quedarse con el patrimonio de los disidentes y víctimas del régimen nazi. Su plan es infalible.

Coloca un testaferro y sociedades interpuestas, que se quedan con las donaciones desinteresadas de “los clientes” de la Gestapo.Image
Todo muy limpio. El nombre de Himmler no aparece. Pero es él quien se queda con todo, como bien atestigua el historiador Anthony Beevor.Image
¿Por qué no fusila al príncipe Friedrich III?

Fácil. Si lo mata, todo el patrimonio de la familia Solms-Baruch revertiría en el gobierno nazi.
No amigo. No.
Himmler lo quiere para sí.Image
Por eso le hace una oferta de esas que no se pueden rechazar.

Me lo das todo, y te perdono la vida. La tuya y la de toda tu familia.

Eso sí, te exilias de por vida. 
El príncipe Friedrich III no se lo piensa.

Firma los papeles, se sube a un avión con su familia, y se exilia en Namibia.

Himmler gana.

La casa de Solms-Baruth lo pierde todo.

¿Todo?
¿Seguro?

Ojito, que la historia no acaba aquí. 

CAPÍTULO IV: EL RETORNO

El príncipe Friedrich III muere en su exilio sudafricano, en 1951.

En su lecho de muerte, le hace jurar a su hijo, el príncipe Friedrich IV, que no parará hasta recuperar el patrimonio de la familia Solms-Baruch.Image
Pero no hay nada que hacer.

La Alemania nazi perdió la guerra, y lo que vino después no fue mejor: La Alemania comunista, que confiscó lo que habían confiscado los nazis.

Imposible recuperar nada.Image
Pero en Noviembre de 1989 todo cambia.

Cae el Muro.

Cae el régimen comunista.

Al poco Alemania se reunifica.Image
Se abre una ventana de esperanza para los Solms-Baruch, que al igual que muchas otras familias víctimas de los nazis, ansían recuperar su patrimonio. Familias judías, pero también familias de industriales o aristócratas anti-nazis.Image
Pero nada es fácil.
El Gobierno alemán sostiene que la donación a Himmler se realizó de forma libre.
Que la Alemania comunista cambió la ley.
Que no hay escrituras que prueben nada.
Que los informes que la familia aporta, del servicio secreto británico, no son fiables. 
Que no está suficientemente atestiguado que el príncipe Friedrich III fuera un anti-nazi.

Al ver que otras restituciones avanzan más rápido, y que la suya se encalla, la familia Solms-Baruch opta por demandar al estado alemán.

Van 30 años de juicios.

El motivo de fondo es que no es fácil restituir millares de hectáreas de tierras de titularidad pública.
Es fácil devolver un cuadro, o una casa.

Lo de los Solms-Baruch es otra liga. Millones de m2.

Pero la historia sigue...Image

CAPÍTULO V: HOY

Os presento al nieto del príncipe Friedrich III, e hijo del IV. Como no podía ser de otra forma, se llama Friedrich V.

También le prometió a su padre, en su lecho de muerte, que no pararía hasta recuperarlo todo.
Eso fue en 2006.Image
El príncipe Friedrich V ha hecho básicamente 2 cosas:

Viendo que el asunto se encallaba en los tribunales alemanes, ha elevado la causa al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.Image
Pero su segunda línea de actuación es la más interesante:

Ha puesto la investigación y documentación del caso en manos de los mejores historiadores…Image
Como os decía antes, Anthony Beevor, documentando el chiringuito de Himmler.

Especialistas en derecho inmobiliario y en registros de la propiedad de la época comunista, que atestiguaron la orden de los nazis de destruir todos los documentos relativos a la “donación” a Himmler.Image
Pero llegamos a la parte más sorprendente…

Por que sí, esta historia nos depara todavía muchas sorpresas... 

CAPÍTULO VI: LA CONEXIÓN BRITÁNICA

De cara a documentar la participación de su abuelo en el complot para matar a Hitler, Friedrich V contrató a un expolítico británico e historiador experto en cuestiones de servicios de inteligencia.Image
Nigel Allason (Nigel West, en círculos académicos).

Mucha de la información del juicio sale de los archivos del MI6, los servicios secretos británicos.

Después de indagar por los archivos del MI6, y de tener acceso a documentos desclasificados recientemente...Image
... el señor West descubrió un detalle sorprendente, un detalle que cuestiona la versión oficial de la historia…

Volvemos a la Operación Valkyria.Image
La tesis oficial es que un grupo de militares y aristócratas prusianos, desencantados con Hitler y decididos a acabar con la guerra, tramaron un complot para asesinarlo.

Un complot, sin ayuda de ningún país tercero. 
Pues parece que no fue así…

Deja que te presente a otro protagonista de esta historia: Otto John.Image
John fue uno de los co-conspiradores.
En aquel momento, era un abogado alemán de 35 años, que trabajaba para la compañía aérea Lufthansa, motivo por el cual viajaba frecuentemente a Madrid.Image
Tras el intento fallido de asesinato de Hitler, Otto consiguió escapar al Reino Unido. No así su hermano, que fue fusilado.

¿Fin de la historia?

Pues no… 
Según el historiador Nigel West, los documentos desclasificados por el servicio secreto británico demuestran que Otto John era un agente al servicio del MI6, al menos desde 1942.

¿Su nombre en clave? Whisky.Image
En los 2 años precedentes al intento de asesinato de Hitler, constan al menos 12 reuniones en Madrid con espías ingleses.

12. 
Eso sí, este descubrimiento pone en valor mucha de la documentación que el príncipe Friedrich V aporta al juicio contra el estado alemán.

Su abuelo fue un anti-nazi. Perdió por ello su patrimonio. Y sus herederos tienen derecho a la restitución.Image

EPÍLOGO

El caso sigue abierto. Va para largo.

Sin duda merece una novela, o una película.

En cualquier caso, esta historia es testimonio de los que lucharon y arriesgaron su vida para acabar con Hitler, desde dentro del propio régimen nazi.Image
No puedo evitar pensar en paralelismos con nuestra situación actual.

¡A ver si hay suerte y alguien hace lo mismo con Putin!!!Image
Sinceramente, esta historia me ha encantado. Me cuesta despedirme de ella.

No sé cómo acabarla.

Quizás la mejor manera sea con una foto.

Esta foto.

La del pequeño Friedrich V ante la tumba de su abuelo, jurando quizás seguir con su lucha.Image
--- FIN ---

Hasta aquí el hilo de hoy. Gracias por leerme.